7 Tips para Ahorrar en tus Facturas de Internet Residencial en USA

Una conexión a Internet confiable ya no es una opción, se ha convertido en una necesidad indispensable en el día a día, pero el costo mensual que conlleva puede ser una carga para nuestro bolsillo. Si bien algunos proveedores de Internet son más baratos que otros, aún puedes esperar pagar una buena cantidad por un servicio de Internet residencial.

Los mejores  proveedores de servicios de Internet (ISP) intentan brindar soluciones con buena relación calidad-precio ofreciendo conectividad web confiable y velocidades rápidas para satisfacer las necesidades de sus clientes. Pero si nos enfocamos en “cómo ahorrar en las facturas de Internet” hay ciertos tips que sin duda ayudarán a disminuir los gastos mensuales de internet.

1. Explora las ofertas de internet en tu área y compáralas

Varios proveedores de servicios de Internet tienen disponibles una variedad de ofertas y paquetes económicos que sin duda son ideales para el objetivo de ahorrar en el servicio de internet. Registrarse en tales ofertas pueden ayudarte a ahorrar mucho dinero. Por lo tanto, siempre es una buena idea buscar el proveedor que ofrezca los planes y precios que mejor se adapten a tus necesidades.

En este sentido, puedes consultar los planes que ofrece Spectrum, este proveedor brinda servicios de Internet de alta velocidad, sin límites de datos, sin contrato y a precios asequibles. Puedes comunicarte con Spectrum servicio al cliente 24 horas para recibir soporte e información que te ayudará a encontrar la oferta de Internet más adecuada a tu presupuesto y las mejores velocidades de conexión.

Si te encuentras en busca de una buena conexión a Internet a bajo costo, es indispensable estudiar adecuadamente el ISP que deseas contratar, investigue todas los planes, promociones y ofertas que tienen disponibles y registrarse con la que mejor se adapte a tus requisitos en general.

2. Opte por contratar paquetes 

¿Cómo contratar más servicios puede reducir una factura? Bueno, no necesariamente, es probable que ya estés pagando por servicios como el cable y el Internet, y definitivamente estos servicios son más económicos cuando se paga por un paquete combinado en lugar de pagarlos por separado o adquirirlos de diferentes proveedores.

Las empresas entienden que sus clientes quieren ahorrar dinero, pero también quieren comodidad. Como tal, los ISP combinan varias opciones y funciones para ofrecer más valor y mejorar la experiencia del usuario. Solamente debes comunicarte con el servicio al cliente del proveedor que tengas contratado para negociar ofertas de paquetes; incluso podrías descubrir que hay una oferta promocional disponible que aún no has aprovechado. 

Por supuesto, en algunas situaciones, hacer lo opuesto al paquete (deshacerse de la TV por cable y concentrarse en pagar solo por Internet) podría terminar siendo una opción más barata.

3. No pagues más por una velocidad que no necesitas

Siendo honestos, todos queremos la velocidad más alta que ofrece nuestro proveedor de internet pero ¿Realmente la necesitamos? Un paquete de Internet rápido probablemente esté entre tus prioridades si trabajas desde casa o eres un gamer apasionado y tienes otras personas en la casa (ya sean varios compañeros de cuarto o una familia). Pero eso aún podría significar que puedes contratar  un plan de 500 Mbps en lugar de pasar directamente a un nivel gigabit completo o incluso a un plan multigigabit. 

Pero por ejemplo, si vives únicamente con tu pareja y no están trabajando de forma remota y usan su servicio de Internet para poco más que enviar correo electrónico y consultar algunos sitios, es posible que la mejor consideración sería reducir aún más tu velocidad de Internet. Quizás puedas pasar de un plan de 500 Mbps a un nivel de 300 Mbps. Esta podría ser una manera fácil de reducir tu factura sin afectar la calidad de tu experiencia en Internet.

4. Adquiere tu propio equipo de Internet residencial

Muchas empresas de servicios de Internet cobran una tarifa de alquiler mensual por utilizar sus equipos. A menos que tengas tu propio módem o router, deberás pagar esta tarifa. Eso significa que pagarás aún más dinero por Internet residencial y podría generar cientos de dólares en tarifas pagadas en unos pocos años.

Una forma de solucionar este problema es comprando tu propio equipo. Gastarás dinero por adelantado para comprar uno, pero este cambio a largo plazo podría resultar más barato e incluso podría aumentar la velocidad y rendimiento de tu conexión. Si no deseas comprar un dispositivo nuevo y costoso, verifica si alguien vende un dispositivo compatible en tu área local.

5. Manténte siempre atento a tu factura de Internet

Salvo que se realicen nuevas actividades de navegación o transmisión, una factura mensual de Internet residencial debería ser prácticamente la misma todos los meses. Lo primero que debes hacer al intentar reducir su factura es averiguar cuánto te están cobrando y cuántos datos estás utilizando. 

La revisión de tu cuenta revelará cualquier inconsistencia en tus cargos habituales y es posible que haya tarifas adicionales que desconocías. Comprueba si hay aumentos inesperados en los precios de los planes de Internet, especialmente si estás respetando  tu asignación de datos, ya que estos gastos podrían acumularse con el tiempo. Tener esta información a mano será clave cuando llegue el momento de negociar con tu proveedor. Si algún pago en su factura no está claro, comuníquese con su ISP para obtener una aclaración.

6. No excedas tus límites de datos 

Sin duda, antes de contratar un proveedor de internet residencial, debes verificar que no tenga una cantidad asignada de ancho de banda de datos por mes ya que si excedes la cantidad de datos establecida para tu plan de Internet, puedes incurrir en cargos adicionales y el ISP limitará tu velocidad. Pero en caso que no tengas más opción que contratar un proveedor con límites de datos, es importante que mantengas el control de los datos que utilizas para evitar cargos por excesos.

La revisión de tu factura de Internet revelará cargos adicionales si excedes tu límite de datos. En lugar de reducir el consumo, es posible que puedas obtener un plan con un límite de datos más alto, que puede ser más asequible. Además, puedes buscar proveedores de Internet que ofrezcan datos ilimitados en tu área.

7. Verifica las opciones de Internet de bajo costo

Otra posible forma de reducir tu gasto en Internet residencial es investigar qué programas de descuento podrían estar disponibles y para los cuales aplicas. Debes realizar tu búsqueda en programas gubernamentales para ayudar a los clientes elegibles a reducir costos. Eso comienza con Lifeline, un programa que ofrece asistencia a hogares de bajos ingresos. Obtendrás un poco más de $9 de descuento mensual en tu factura de banda ancha si eres elegible.

Si calificas para Lifeline, también serás elegible para el Programa de Conectividad Asequible (ACP), un subsidio gubernamental de la Comisión Federal de Comunicaciones que ofrece un descuento de $30 al mes en su servicio de Internet (y hasta $75 mensuales para hogares en tierras tribales).  Para calificar para ACP, los ingresos del hogar deben estar 200% por debajo de las pautas federales de pobreza.

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